En esta receta empezaras por con la salsa, para ello debes pelar y picar en trozos pequeños dos dientes de ajos, 2 cebollas, los 7 tomates y las 8 hojas de albahaca,  luego en una olla vierte suficiente aceite de oliva y agrega los dientes de ajo picados y sofríelos hasta que queden doraditos, a continuación agrega la cebolla y ve moviendo constantemente hasta que la cebolla tome color, seguidamente agrega el tomate y ve revolviendo, agrega la pimienta y la sal al gusto y sigue revolviendo por aproximadamente media horas hasta que el tomate ablande bien.

Una vez blandos los tomates agrega las hojas de albahaca picaditas y déjalo 5 minutos más a fuego lento, seguidamente con un batidor de mano tritura todos los ingredientes y pásalo por un colador y ponlo nuevamente a cocinar por alrededor de 10 minutos sin dejar de mover para evitar que se pegue o se queme y resérvalo.

A continuación, pon en remojo el pan con la leche, mientras que dejas en remojo el pan, pon en una trituradora el choco, una vez que ya este triturado agrégaselo al pan remojado, añade los hueveos y las otras dos cebollas picadas y comienza unir bien los ingredientes, cuando todo esté bien integrado refrigéralo por aproximadamente 2 horas para que tome consistencia.

Pasada las 2 horas solo tendrás que empezar a moldear las albóndigas, una técnica puede ser utilizando una cuchara, tomas la cantidad de mezcla y la viertes encima de la harina y con las manos la enharinas bien y luego las moldeas, una vez que las tengas listas, deberás pasarla por aceite bien caliente, es recomendable que tengas suficiente cantidad de aceite para que las albóndigas se cubran todas, déjalas dorar y retíralas.

Trata de ponerlas en papel absorbente para retirar el exceso de aceite, cuando ya estén listas agrégalas a la salsa de tomate que habías preparado al principio y déjalas por aproximadamente 10 minutos tapadas a fuego medio, revolviendo constantemente para evitar que se quemen o se peguen, luego retíralas del fuego.